El Monstruo del Lago Ness

 

 

 

En el norte de Escocia, hay un lago cuyas aguas frías y oscuras ocultan un secreto, una de las criaturas más famosas y controversiales de la criptozoología: el monstruo del Lago Ness. Una leyenda de 1500 años de antigüedad, con más de 1000 avistamientos, hasta el día de hoy no puede comprobarse ni negarse su existencia.

¿Quién es Nessie?

 

El monstruo del Lago Ness o Nessie (Niseag en escocés gaélico) es una criatura desconocida que se dice, habita desde hace siglos en las aguas del famoso Loch Ness, ubicado en las Tierras Altas o Highlands escocesas. Es el más famoso de todos los monstruos de lagos escoceses.

La imagen popular es la de una criatura de cuello largo y cabeza pequeña, similar a un plesiosaurio. Se le ve normalmente con un largo cuello, una o más jorobas saliendo a la superficie; o dejando un rastro mientras se recorre el lago.

Hogar, dulce y frío hogar

El Lago Ness es el más grande de los tres lagos de la falla geológica conocida como Gran Glen, un conjunto de valles rodeados por montañas, que recorre Escocia desde Fort William hasta Inverness. Cruzando esta falla está el canal de Caledonia (inaugurado en 1822, reabierto en 1873), que conecta cuatro lagos.

El Gran Glen se formó hace 444 millones de años durante la orogenia caledoniana, periodo en el que se formaron montañas y fallas por diversos lugares incluyendo Escocia. El movimiento horizontal de las placas tectónicas le daría la forma de línea definida que tiene hoy.

El Lago Ness se formó aproximadamente hace 10 000 años tras el derretimiento de un glaciar. Tiene 37 km de longitud, 2.7 km de ancho y 226.8 metros de profundidad, lo que lo convierte en el lago más voluminoso de Escocia: contiene más agua que todos los lagos de Inglaterra y Gales juntos. Se encuentra a 16 km sobre el nivel del mar; y contiene una isla artificial (crannog) llamada Isla Cherry, construida durante la edad de hierro.

Es alimentado por cerca de 40 arroyos, principalmente por 7 ríos. De este lago efluye el río Ness. Sus aguas son dulces pero oscuras, debido a la presencia de turba; su temperatura se encuentra entre los 5o C a 15o C, pero jamás se congela.

Siguiendo el rastro de Nessie

La Leyenda antigua

El kelpie

El kelpie es un espíritu maligno de la mitología celta capaz de cambiar de forma para atraer a sus víctimas. Comúnmente aparece con la forma de un magnífico corcel negro o blanco, pero también era capaz de tomar forma humana.

Estos seres habitaban los ríos y lagos escoceses. A sus orillas, los viajeros encontraban un asombroso caballo al que intentaban domar, pero cuando los montaban, el kelpie corría velozmente hacia el agua. Ahí adoptaba su verdadera forma, la cual es desconocida, y los devoraba. En su forma humana, el kelpie fingía que se ahogaba o les persuadía para acercarse al agua. La única manera de domar a un kelpie era quitándole su brida, lo que permitía domarlo.

En el libro “The popular superstitions and festive amusements of the Highlanders of Scotland” (1823) de William Grant Stewart, en el capítulo Water-Kelpies, se cuenta la historia de un kelpie que adoptaba la forma de caballo, que aterrorizaba a la gente que vivía cerca del Lago Ness y estaba siempre al acecho. Un hombre llamado James Mcgrigor decidió detenerlo y un día que lo encontró, el kelpie creyó que podría llevárselo, pero el hombre le atacó con una espada y cortó su brida. Mcgrigor la recogió y se la guardó.

El kelpie suplicó que le devolvieran su brida. Mcgrigor accedió a cambio de conocer los poderes que ésta contenía. El kelpie reveló que de ella obtenía su poder de transformación y si la perdía moriría en 24 horas. Igualmente, la brida permitía ver seres místicos como hadas y brujas.

Tras conocer esta información, Mcgrigor decidió conservarla, enfureciendo al kelpie, quien lo siguió hasta su casa y se colocó frente a la entrada, asegurando al hombre que no entraría a ésta con la brida en su posesión. Mcgrigor se la lanzó a su esposa a través de la ventana trasera de la casa, y al no poder entrar el kelpie, debido a que la casa estaba protegida, se retiró.

La Bestia Picta

Tal vez se pueda considerar que la más antigua imagen que tal vez haga referencia a Nessie es la Bestia Picta, el tercer símbolo más común del arte picto cuyas representaciones más antiguas datan de aproximadamente hace 1500 años.

Los pictos solían representar de forma exacta a los animales en su arte, pero no se ha podido identificar a qué animal representa la Bestia Picta. Algunos de los candidatos son el delfín, el elefante, el caballo, el caballito de mar, o incluso alguna criatura mítica como el kelpie u otro animal.

Otro posible origen serían los broches dragonescos, los cuales habrían surgido alrededor de los siglos I y II D.C. y con el paso del tiempo habrían adquirido característicos de animales marinos, como delfines.

Piedra de Drumbuie 1

Esta piedra fue encontrada en la granja Drumbuie, cerca de Drumnadrochit. Se trata de una piedra picta de clase I hecha de arenisca roja. Grabadas en ésta se encuentran una serpiente en forma de S, entrecruzada con un grabado con forma de Z. Debajo se encuentran dos discos conectados.

Esta y la piedra Drumbuie 2 fueron encontradas en 1864 como parte de lo que parecía ser una cista: una tumba donde se colocaban los restos del fallecido junto con algunos bienes materiales. Las piedras serían parte de la “tapa” de la tumba.

Estas piedras fueron llevadas a la casa Balmacaan hasta que en 1995 fue llevada al Museo Nacional de Escocia en Edimburgo, donde se encuentra actualmente, mas no en exhibición.

Debido a que el lugar donde se encontraron las piedras está a orillas del lago Ness se considera que pudiera ser una representación de algún animal en sus aguas. Pero ésta también podría ser simplemente la representación de una serpiente o de alguna deidad. El camino en forma de Z y los discos dobles pudieran representar el más allá.

Vita S. Columbae

 

El avistamiento más antiguo se relata en la hagiografía Vita S. Columbae, La Vida de San Columba, escrita por Adomnán de Iona en el 704 D.C., aproximadamente 100 años después de la muerte del santo. Esta historia se narra en el Libro II: De sus poderes milagrosos, en el capítulo XXVIII, De cómo un monstruo acuático fue expulsado en virtud de la oración del hombre santo.

En el año 565 D.C., San Columba se encontraba cerca del río Ness cuando se vio a un grupo de personas de origen picto, enterrando a un hombre que fue mordido violentamente por un monstruo acuático mientras nadaba. Su cuerpo fue rescatado cuando ya era tarde.

Ante esta situación, San Columba ordenó a uno de sus acompañantes, Lugne Mocumin, que se metiera al lago y al hacerlo, el monstruo fue hacia él. El santo alzó su mano e invocando el nombre de Dios y haciendo la señal de la cruz, dijo en voz alta: “No irás más lejos ni tocarás a este hombre, regresa a toda velocidad.”

Tras oír estas palabras, el monstruo, que ya había alcanzado a Lugne, huyó aterrorizado de inmediato.

Jamás se volvió a oír de algún ataque a humanos. Por siglos, la leyenda del Lago Ness continuó. Pero no se haría de fama mundial hasta 1933, cuando surge la leyenda moderna…